Necesitas Paciencia

La Estaca de Tacna 10/8/2022

Sólo hace un mes que soy líder misionero, pero he aprendido muy rápidamente que la paciencia es realmente una virtud que todos necesitamos aprender.

Piénsalo, en el mundo actual del "todo instantáneo" esta cualidad es difícil de cultivar porque estamos demasiado ocupados distrayéndonos con la "solución rápida" y con cualquier cosa que desvíe nuestra atención de lo que nos preocupa y por ello es difícil lograr un crecimiento sostenido.

Todos queremos tomar una píldora mágica que resuelva instantáneamente nuestros problemas, pero también sabemos que esto rara vez funciona.  Piensa en toda la publicidad que vemos, la mayoría ofrece soluciones simples a nuestros problemas y estamos tan desesperados por el alivio que compramos de buena gana y cuando no ayuda, nos desanimamos o nos enfadamos por un momento, pero luego seguimos buscando una "solución rápida" diferente.  El ciclo es agotador y rara vez conduce a algo de valor, ¡pero parece que no podemos controlarnos!

Admitámoslo, aprender a tener paciencia no es divertido.  Todos hemos escuchado el chiste de que no es sabio rezar por la paciencia porque el Señor definitivamente nos obligará y enviará una prueba.  En el pasado, he tratado de ignorar todo el tema de la paciencia. Así que la estrategia que utilizaba para soportar las pruebas era apretar los dientes y simplemente aguantar hasta que la prueba pasara como una tormenta repentina. Esto funciona bien cuando las pruebas son cortas, como un atasco, pero cuando se trata de dificultades a largo plazo, esto es una existencia miserable y una gran pérdida de tiempo. 

Desde entonces he aprendido que es mejor para mí buscar el crecimiento y el desarrollo durante los tiempos de prueba, porque abre mi corazón a la paz y el consuelo del Señor y me permite encontrar la felicidad en mi día a día, incluso cuando las cosas son difíciles. De esto se trata la paciencia, pero no es fácil de hacer, porque estamos demasiado ocupados buscando una salida rápida de emergencia.

El Elder Todd Budge enseñó que el aprendizaje de la paciencia hace que uno sea consistente y resilientemente feliz.

¿No es eso lo que todos queremos para nosotros y para nuestros hijos?

Tengo una hija que soportó durante años una enfermedad debilitante.  En una de las muchas bendiciones del sacerdocio que recibió de su padre, se le dijo: "La paciencia en momentos como éste es muy dura y, sin embargo, la paciencia es necesaria y tienes necesidad de ella".

Cuando uno se acerca a una bendición con fe para ser sanado, esas son palabras difíciles de escuchar.

Me pregunté: "¿Qué quiere decir Dios con "tienes necesidad de paciencia"? ¿Acaso 4 años de sufrimiento no son suficientes para un niño?".   Entonces recordé que he escuchado esta frase en alguna parte de las escrituras y me sorprendió que fuera Hebreos 10:35-36 porque esta es una de mis escrituras familiares y favoritas en la Biblia pero nunca la relacioné con la paciencia. (¡otro ejemplo de cómo siempre he tratado de evitar el tema!)

Dice así:

No desechéis, pues, vuestra confianza, que tiene gran recompensa. Porque tenéis necesidad de paciencia, para que, después de haber hecho la voluntad de Dios, recibáis la promesa.
— Hebreos 10:35-36

Siempre me he centrado en la primera parte que nos enseña a recordar nuestras experiencias espirituales anteriores para que podamos mantener nuestra fe a través de las pruebas.  Pero me he saltado totalmente la parte de la paciencia. Así que me pregunté: "¿Qué tiene esto que ver con el desarrollo de la paciencia?". 

Entonces se me abrieron los ojos y me di cuenta de que Dios no está diciendo que tengo que aprender a esperar y sufrir, sino que está diciendo que "tengo que aprender a confiar en Él... ¡Él tiene un plan mejor para mí!  Necesito ver cómo se desarrolla".  Necesito apoyarme en él y aprender en lugar de esconderme y esperar a que pase.

Así que la próxima vez que te oigas decir "necesito paciencia" cámbialo por "necesito confiar en Dios".  Porque significan lo mismo.

¿No queremos todos aprender a confiar en Dios?  La única manera de desarrollar esta confianza es si aceptamos y vemos la incomodidad como una oportunidad para llevar nuestros problemas al Señor y pedirle ayuda y dirección.  Esto nos ayuda a ser más autosuficientes, lo que nos da más confianza, más poder y más paz a medida que avanzamos en nuestras vidas.  Sin ello, no tenemos esperanza.

Tengo el testimonio de que Dios tiene un plan para cada uno de sus hijos.  Rezo para que todos podamos confiar en Él y ver una prueba como un privilegio con crecimiento y desarrollo para que podamos convertirnos en individuos exitosos, resistentes y felices, incluso cuando las cosas son difíciles.

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